Saltar al contenido

Navidad, ¿cuánto dinero voy a perder por el etanol?

Se acercan las vacaciones de Navidad y con ello todo lo que conlleva: comidas de empresa, cenas de navidad, salir a festejar el año nuevo con los amigos, hacer un balance económico positivo y darse algún homenaje (en el caso de que se pueda). A causa de esto, en las fechas cercanas a la Navidad siempre se incrementa la vigilancia vial: más controles, más radares y más efectivos en las carreteras protegiendo al ciudadano.

Claro, esto a veces nos ha llevado a algún disgusto que otro, sea porque hemos dejado la autovía por la salida errónea o en la circular al entrar a nuestro pueblo, allí estaban, lo que nadie quiere ver después de haber tomado algunas copas… Y al cabo de unos minutillos de nerviosismo donde el ritmo del corazón se dispara, te ves soplando por una boquilla unos segundos y pensando: ¡Pufff que necesidad tenía!

Alcoholes, ¿qué son realmente?

Los alcoholes son compuestos que poseen un grupo hidroxilo (OH) y están caracterizados por nombres que terminan en «ol». Algunos ejemplos son el colesterol (función vital en la biosíntesis de neurotransmisores), Colecalciferol (Vitamina D3, ayuda a mantener los huesos fuertes), entre otros…

Alcoholes importantes. Fuente Chemsketch

Dentro de los alcoholes existen 3 subgrupos: alcohol primario, alcohol secundario y alcohol terciario. Todo ello depende de la cantidad de átomos de hidrógeno (H) que estén presentes en la posición adyacente al grupo hidroxilo (lo que se denomina posición alfa). Esta aclaración es importante conocerla porque juega un rol importante para los procesos de oxidación.

Subgrupos del alcohol. Fuente Chemsketch

En los procesos de oxidación lo que ocurre es que esos átomos de hidrógeno se van perdiendo dando lugar a otros compuestos, como veremos en el apartado 3.

¿Que pasa en las oxidaciones de los alcoholes?

Se pueden obtener los alcoholes de cualquier otro compuesto orgánico a través de reacciones químicas, muy conocidas a nivel de laboratorio. Algunas de estas reacciones pueden ser: La hidroboración y posterior oxidación, y la ozonólisis, ambas reacciones implican un proceso de oxidación similar al descrito en este artículo.

Pero el tema que realmente a nosotros nos interesa, no es otro que la reacción química que sufre el alcohol cuando soplamos por la boquilla de plástico del alcoholímetro. El compuesto orgánico que nosotros tomamos es etanol que al reaccionar con un agente oxidante, el dicromato de potasio (K2Cr2O7), se transforma en ácido acético gracias a unas condiciones ácidas, dando lugar a una oxidación del alcohol. Por otro lado, el agente oxidante también sufre una reacción, en este caso una reacción de reducción, y el anión dicromato (Cr2O72-) pasa a catión Cr3+.

Oxidación de alcoholes. Fuente Chemsketch.

En este proceso, el etanol es oxidado y el reactivo cromo, reducido. El nuevo compuesto de cromo presenta un color diferente, por lo que estas reacciones pueden ser controladas por el cambio de color del anarajando al verde. Gracias a este fenómeno, estas reacciones han sido la base para muchas pruebas de respiración que evalúan la concentración del alcohol en sangre.

La prueba consta de un tubo que en el extremo posee una boquilla y en el final una bolsa. El interior del tubo contiene el reactivo oxidante sobre la superficie de un sólido inerte de sílice. Por lo que, cuando el usuario sopla, el alcohol presente en la respiración reacciona con el agente oxidante y produce un cambio de color.

El breathalyzer se basa en el mismo concepto. Un volumen medido de respiración burbujea en una disolución acuosa ácida de dicromato de potasio y el cambio de color se mide con un espectrófotometro de ultravioleta-visible (UV-VIS).

Control de alcoholemia.

¿Se puede evitar el positivo, la pérdida de dinero y/o de puntos?

La pregunta del millón y el tema de conversación de grupos de amigos. Se comentan tantas cosas como que «si tomo café no doy positivo», «si como chocolate tampoco», «voy a andar un poco antes de coger el coche y así se me baja el alcohol en sangre». Analizaremos todo esto…

Como ya se ha comentado el etanol es un alcohol primario, por lo que tiene dos átomos de hidrógeno en su posición alfa adyacente al grupo -OH, por lo que se puede oxidar dos veces. Por lo que, el etanol en nuestro cuerpo sufre un primer proceso de oxidación que produce acetaldehído, un intermediario tóxico y carcinógeno conocido, mientras que la segunda oxidación produce acetato que se descompone rápidamente en agua y dióxido de carbono. Estas reacciones químicas están catalizadas por la enzima alcohol deshidrogenasa y aldehído deshidrogenasa.

Metabolismo del alcohol. Fuente Chemsketch

El etanol puede ser metabolizado por varios procesos o vías. La vía más común es la citada anteriormente. Se sabe que pequeñas porciones de alcohol también pueden ser eliminadas al interaccionar con ácidos grasos afectando a páncreas e hígado. Participan otras enzimas que eliminan parte del alcohol cuando la ingesta ha sido desorbitada.

Cuando una persona toma alcohol, ya sea en cerveza, vino, whisky, etc… está aumentando la concentración de acetaldehído en el cuerpo, siendo este el causante de la deshidratación, náuseas, vómitos y otros síntomas desagradables que están asociadas a la embriaguez. Por lo que, si la causa del positivo es la alta concentración de etanol y el estado de embriaguez por la alta concentración de acetaldehído, deben de hacerse la pregunta: ¿realmente puedo modificar dichas concentraciones, una vez ingerido el alcohol, para que no me multen?

Para reflexionar

De nada. De nada porque gracias a este post ya no podrás decir: no lo sabía. Cuándo te vayas con tus amigos, compañeros de empresa o cualquier otro evento que surge en tiempos de fiesta, sabrás que si te desmadras puedes pagar unas consecuencias muy altas. Por lo tanto, la mejor manera de evitar cualquier susto es no beber o beber muy poquito, porque podrás engañar a tus colegas e incluso al policía, pero al dicromato de potasio, no lo engañas.

Al igual que para poder evitar ciertos síntomas causados por la embriaguez, es aconsejable beber mucha agua mientras tomas etanol y hacer pausas largas, si puede ser, entre copa y copa. Pero si te pasas, el acetaldehído se transformará en ácido acético y se quedará en tu cuerpo hasta que lo elimines.

Las navidades son momentos de alegría pero al igual que un pequeño se puede llevar un chasco con los regalos de los Reyes o papá Noel, un adulto puede terminar o empezar el año con una rabieta.

Conclusión

Se puede decir que en estas fechas, el aumento de reacciones de oxidación de alcoholes aumenta de manera exponencial en todo el territorio nacional. ¿Recuerdas en qué consiste? El etanol reacciona oxidándose mientras que el agente oxidante sufre procesos de reducción. Dicha reacción son fáciles de controlar por el cambio de color del agente oxidante, ya que pasa de un anaranjado a verde.

Artículo editado por Tatiana Suárez Rodríguez

Bibliografía

  • Klein, D. (2012) Química Orgánica, Editorial Médica panamericana.

Ángel Pedro Castejón Gimenez

Ángel Pedro Castejón Gimenez

WhatsApp
Twitter
Facebook
LinkedIn
Telegram

Únete como institución:

Permite a toda tu institución divulgar aquí

Únete como grupo:

Divulga las investigaciones de tu grupo de investigación

Únete a la plataforma:

Empieza a divulgar ciencia sin límites